Palma de Mallorca, la «Perla del Mediterráneo», es una ciudad muy versátil y emocionante. Ya sea cultura, compras, relax, deportes, vida playera, vida nocturna o cualquier otra cosa que el visitante espere de una gran ciudad. Palma de Mallorca cumple todos los deseos…
La capital de Mallorca está situada en la bahía de Badia de Palma, de 20 km de longitud. Vista desde el mar, la panorámica de la ciudad parece el decorado de un teatro. La magnífica catedral de La Seu se divisa desde lejos. En Palma viven unas 400.000 personas, más de la mitad de la población de Mallorca. Los palmesanos no sólo viven del turismo. La administración, los bancos, el aeropuerto y el puerto, así como el comercio y la industria, ofrecen muchos puestos de trabajo.
Cultura, vistas al mar y sensación de gran ciudad
La magnífica catedral del siglo XIV de Palma, conocida como La Seu, es un punto de referencia obligado en la capital mallorquina. Este impresionante edificio de arenisca dorada es imposible de pasar por alto: una de las estructuras góticas más altas de Europa, domina el Parc de la Mar, una vista única para cualquiera que llegue por mar.
Esta catedral se construyó en el emplazamiento de una mezquita que
estuvo junto al palacio real La Almudaina durante la dominación árabe. La historia de La Seu comenzó cuando el rey Jaime I se dirigía a la isla: en la batalla contra el mar embravecido, su flota de barcos y marineros estaban en gran peligro, el joven rey hizo el juramento de que construiría una enorme catedral si conseguía expulsar las murallas de la isla. El éxito de su empresa sería visible para todos.